Tu marca es mucho más que un logotipo
Seguramente se te ha presentado una situación en la que tu logotipo no se ajustara al formato que querías imprimir. Has recibido un mensaje que indicaba que tu logo tenía baja resolución, aunque en pantalla parecía estar bien. Y probablemente también hayas experimentado una variación en el color cuando has visto el resultado de la impresión.
Con la llegada de los smartphones y la constante innovación tecnológica, las pantallas cada vez disponen de más resolución y los colores parecen más vivos que nunca. Vemos logotipos con degradados muy llamativos que luego en impresión sin embargo no lucen igual que en pantalla.
No sabes qué sucede pero estás convencido de que tu logotipo está bien y el resultado que estás obteniendo no favorece a tu marca.
¿Tienes un logotipo o un manual de marca?
La mayoría los clientes que acuden a una imprenta disponen de un logotipo y desconocen las propiedades del mismo. No obstante, para ellos el logotipo representa su marca.
Es común también que algún conocido con nociones básicas haya creado ese logotipo y éste haya resultado útil para imprimir tarjetas de visita, imprimir flyers o incluso imprimir carteles en pequeños formatos.
¿Cuál es la diferencia entre un logotipo y una marca?
Cuando hablamos de tener una marca, hay un manual de identidad detrás de este término y en éste quedan detalladas las proporciones y características del logotipo. Tonalidades de color, porcentajes de tinta en cuatricromía, Pantone, variaciones, aplicaciones, tipografías empleadas y también la descripción de la marca.
Cuando tenemos únicamente un logotipo, éste habitualmente está grabado en un único modo de color (o bien en RGB, CMYK o Pantone) y dependiendo dónde vayamos a emplearlo, pueden ocurrir variaciones.
¿Pero un logo no es suficiente?
Depende de la actividad de tu negocio y de cómo te presentes. Tener bien definida una marca para una tienda probablemente sea menos importante que para una cadena hostelera. Tener una marca significa que toda tu imagen corporativa sea uniforme. En las franquicias de las grandes empresas siempre percibimos los mismos elementos gráficos y hasta el mobiliario suele ser el mismo. La uniformidad le transmite seriedad y confianza al cliente.
Pero no todo son logotipos y colores
En una marca bien definida suele haber un eslogan que acompaña a los elementos gráficos y que los clientes pueden reconocer con facilidad. El lenguaje de las marcas es igual de importante que su apariencia visual.
Los procedimientos de trabajo y el servicio que se le presta al cliente debe ser uniforme también. Así cómo las ofertas que lanza cada franquicia. No suele haber ofertas diferentes en puntos de ventas de la misma marca. Incluso los saludos de muchos establecimientos suelen ser uniformes.
¿Hasta qué punto somos conscientes de la imagen de las marcas?
Lo cierto es que los consumidores nunca sabemos qué sucede en las casas de las marcas y desconocemos por completo los procedimientos internos. Muchas veces tampoco apreciamos ligeras variaciones visuales, salvo que haya un cambio de color corporativo muy llamativo o que el logotipo haya cambiado por completo.
Nosotros cómo clientes apreciamos la calidad de los productos, el trato y el servicio que nos ofrecen las empresas a nivel personal.
Lo que caracteriza a una buena marca sobre todo es la durabilidad de sus productos y la calidad de su servicio posventa.
Más allá de lo visual, una de las principales razones por las que dejamos de confiar en las marcas es por no recibir el trato que nos esperamos, una vez haya finalizado la venta.
En la actualidad y con las redes sociales cómo altavoz, también es importante mantener a tus clientes enganchados.
Conseguirás seguidores por la calidad de tu contenido y por los valores que compartes.
Un buen logotipo y una buena identidad corporativa no son suficientes para ganarse la confianza de los consumidores.
En un mundo tan competitivo y saturado de ofertas, siempre nos quedamos con el proveedor que nos ofrece una mejor experiencia de usuario.
El precio no siempre es el factor más importante y tu marca es mucho más que un logotipo para tus clientes.